ENFOǪUE AL PATRIMONIO

Arqueología urbana en la ciudad de Puebla

Dra. Citlalli Reynoso Ramos, Mtro Erik Chiquito Cortés, Mtra. Lillian Torres González, Arqueólogo Arnulfo Allende Carrera

Arqueología urbana en la ciudad de Puebla

La etimología de la palabra arqueología proviene del griego archaios que significa antiguo y logos que significa estudio. Esta definición tuvo su origen en el siglo XIX, época de anticuarios y de viajeros, donde la arqueología era considerada el estudio de lo antiguo. Sin embargo, la arqueología se ha transformado en una ciencia y ha tenido una transformación epistemológica y ontológica importante. En la actualidad, podemos decir que la esencia de la arqueología no se limita al tiempo sino a la cultura, por lo que sería mejor definida como la ciencia antropológica que estudia y analiza la materialidad con el objetivo de interpretar la actividad humana dentro de su dimensión cultural, siendo el límite temporal el día de ayer (pasado reciente). Las diferentes huellas materiales e inmateriales que deja la actividad humana son los medios para interpretar el pasado y son desde restos materiales hasta memoria, residuos químicos, secuencias estratigráficas, restos biológicos entre otros. 

Puebla tiene arqueología en la medida que el territorio, que hoy ocupa la ciudad, fue habitado por grupos humanos desde época prehispánica hasta el presente. La práctica arqueológica en la ciudad es relativamente reciente y enfrenta varios retos que vencer, aun así, las diferentes exploraciones que se han realizado han dotado a nuestra metrópoli de patrimonio arqueológico. Incluso, el descubrimiento en Casa de Mendrugo ha cambiado nuestra comprensión sobre la historia de la ciudad. El desarrollo de Puebla no inicia con su fundación, sino que engloba un pasado y un presente que es analizado en este número por la mirada arqueológica. Así, el lector y la lectora encontrarán en el número un recuento que abarca la arqueología prehispánica, pasando por el siglo XVI, periodo colonial, periodo industrial, siglo XIX, siglo XX y la gestión del patrimonio arqueológico en Puebla. Así como tres secciones que reseñan: un rescate arqueológico en Casa Aguayo, la exposición Voces Subterráneas y el Catálogo de Mayólicas. El objetivo de este número es mostrar el legado arqueológico de la ciudad como un patrimonio que está en proceso de ser reconocido y valorado, tanto por los organismos públicos locales, como por los ciudadanos.


Este número fue editado por los cuatro arqueólogos que suscriben esta carta con el anhelo de generar interés y aprecio por un patrimonio vulnerable, y en ocasiones, en alto riesgo de ser perdido. Es necesario fortalecer políticas gubernamentales de protección y conservación, además de fomentar la investigación por diversas instituciones locales como el Ayuntamiento y la BUAP, bajo los reglamentos vigentes del INAH, que permitan consolidar una arqueología urbana como práctica sistemática. Cada día, vestigios arqueológicos son destruidos por el crecimiento urbano, la especulación inmobiliaria, el desinterés y la deficiencia en la aplicación de las normas vigentes. El momento para detener esta pérdida irreparable es ahora, y los actores para llevarlo a cabo, somos todos: autoridades, especialistas, universitarios y sociedad civil.